Bonito arranque de fiestas. Populares como siempre y en familia se reúne el vecindario morlandí para comprometerse con su festividad. Más íntimas incluso.
Desde siempre, las Festes de Cala Morlanda han sido muy trabajadas y luchadas por el vecindario y este año aun más. El compromiso ha sido total y la comunidad ha respondido con amplia colaboración y detalle en cada uno de los actos. El pasado jueves 29 de julio la Associació de Veïnats de Cala Morlanda daba el “chupinazo” a sus fiestas que permanecerán en activo hasta el próximo domingo 8 de agosto.
Unas fiestas organizadas con esmero, con el fin de mantener la seguridad en todo momento, recordando a los asistentes portar la mascarilla y asegurando terminar siempre todos los actos no más tarde de las doce de la noche. El Ajuntament de Manacor colaboró en la cesión del equipamiento de material, aportando 200 sillas, 10 mesas, papeleras de reciclaje, alternador eléctrico, equipo de sonido y, a su vez, se ha hecho cargo de las labores de limitación y cerramiento del tráfico de vehículos en la zona aledaña a los principales actos. Los diferentes eventos se han realizado y van a seguir realizándose en la ronda del Matí, frente a la Capella. Allí mismo, el Ajuntament y la asociación de vecinos montó el cadafal de fiestas y el mismo jueves de inicio de fiestas se invitó a los vecinos a participar en la decoración del entorno, ofreciendo una bebida refrescante a los participantes. Buena idea para hacer comunidad. Desde entonces, las fiestas y los eventos no han parado de mostrar importante participación.
El vecindario se ha mostrado muy implicado y la alegría popular se desprendía en la mayoría de los actos. El viernes arrancaron con juegos populares y concurso de dibujos, y le siguió el cine de “Jostissi de Carreró”. El sábado apuntaba maneras, y Cala Morlanda también brilló. A las 9 de la mañana ya se despertaba el vecindario con el “Passacarrers renouer!”, y seguidamente, la tradicional Gimcana Morlandera y, a partir de ahí, por la tarde más juegos infantiles. Con los niños copando los actos, los demás también querían su espacio, y lo tuvieron. A las 20’30 horas misa en Cala Morlanda y a las 22 horas vetllada musical d’estiu, con Miquel Serra en el escenario. Un éxito. Al día siguiente, caminata por la mañana hasta el Caló d’en Rafelino y, por la noche, teatro a la fresca con ‘Aigua de Pluja’, a cargo del Grup de Teatre s’Escoleta, de Santa Maria del Camí. A falta de quince minutos para las doce, el mismo domingo hubo fiesta de luz y sonido con algunos fuegos artificiales que recordaron aquellas fiestas que tan lejanas nos parecen hoy en día. Todo muy especial e íntimo.
En la última semana de fiestas, queda por celebrar este próximo viernes la vetllada a la fresca, el sábado la vetllada poética en homenaje al escritor Miquel Àngel Riera, y el domingo 8, con película de Toni Truyols (en la página 16, más información al respecto). Si el tiempo lo permite, seguro no nos va a defraudar.
