En su tercer encuentro con Manacor Comarcal, el presidente de Restauracion CAEB, Alfonso Robledo, hace un repaso a este inicio de la temporada turística y a los principales problemas que padece el sector de la restauración en Baleares.
- Queda poco más de un mes para el inicio del verano, ¿qué tal está el sector de la restauración balear en estas fechas?
- Bien, pero no tan bien como el año pasado en estas fechas, y me explico. Este 2024, como la Semana Santa ha venido tan pronto, pues no ha sentado tan bien al sector. De hecho, siempre que la Semana Santa se adelanta un poco y se lleva a cabo más en marzo que en abril, el sector lo nota, y este año no ha sido una excepción. Ha habido 2.000 vuelos menos que otro años, y es que claro, el tiempo no es el mismo en marzo que en abril. Por tanto, a nivel turístico, esta Semana Santa ha sido más floja que el año pasado.
- ¿Se está consolidando un nuevo tipo de turista tras la pandemia y la guerra en Ucrania?
- Sí, sin duda. Creo que la isla ha mantenido ese turismo que tuvimos prestado de países europeos cercanos al nuestro. Tras la pandemia, el hecho de no tener que hacer viajes largos se valora más, lo que en gran parte explica que ese tipo de turista siga viniendo con la misma asiduidad de años anteriores.
- ¿Ese cambio en el perfil del turista está siendo beneficioso para el sector?
- Por supuesto. Aparte, esto no solo lo nota el sector de la restauración, sino también el de la hostelería. Además, el hecho de que el sector de la hostelería se vaya modernizando y mejorando sus prestaciones, también nos obliga a nosotros a mejorar y ofrecer un servicio de más calidad a los turistas.
- ¿En qué punto se encuentra ahora la falta de trabajadores, y especialmente, de trabajadores cualificados, para el sector de la restauración balear?
- Por desgracia no hemos avanzado mucho en este aspecto. Sin duda, hablamos de un problema complejo, que viene de lejos, y que requiere de tiempo para ser solucionado. Seguimos teniendo problemas graves para contratar personal, y especialmente, personal cualificado.
- ¿Ha implementado algún tipo de soluciones el actual Govern respecto a este asunto?
- Por el momento, el Govern se ha mostrado muy por la labor de seguir ofreciendo formación a los trabajadores, y apoyar a la patronal para seguir ampliando y mejorando los cursos de formación. El problema es que los tiempos son muy lentos. Esta lentitud con el tema de la formación no va acorde al conflicto tan grave con el que el sector se está enfrentando. Además, la falta de vivienda tampoco ayuda. Necesitamos trabajadores de fuera para estos próximos meses, pero para muchos no hay vivienda disponible, lo que hace aún más difícil encontrar trabajadores en un corto plazo.
- Otro aspecto que te preocupa es la falta de transporte público. ¿Habéis hablado con el Govern sobre este tema?
- Sí, veremos cómo evoluciona este tema. Creo que como isla hay que controlar el tope de coches de alquiler, y dar una mayor prioridad al tren, al autobús y, especialmente, al taxi. Creo que no estamos pidiendo algo muy complicado, de modo que estaremos atentos a las medidas que toma el Govern al respecto.
- Antes de acabar, ¿hay algún tema más que quieras destacar?
-En primer lugar, tener en cuenta que la salud de nuestro sector depende mucho de donde preguntes. No es lo mismo preguntar en Palma que preguntar en negocios de Manacor, Llucmajor u otros puntos más del interior de la isla. Y te digo Manacor o Llucmajor como también te podría decir Menorca o Ibiza. De igual modo, tampoco es lo mismo un restaurante con fines claramente turísticos, que otros que no piensan tanto en el turista, y que están abiertos todo el año. Creo que el Govern debe de pensar en todo el sector, y prestar atención más allá de Palma y más allá del restaurante que solo abre en verano. También quiero remarcar la importancia de que el sector reciba más ayudas. Es imprescindible para nuestra supervivencia y para seguir adaptándonos a la realidad vigente.
