En el pasado pleno municipal, la portavoz del PSOE, Núria Hinojosa, formuló una pregunta en relación al hecho de que ya no se otorguen licencias de obra en Cala Murada hasta que el Ajuntament de Manacor no dote de alcantarillado dicha urbanización.
La líder socialista argumentó que la noticia había generado mucho desconcierto y preocupación entre los propietarios de Cala Murada, que a partir de ahora no podrán edificar obra nueva, hacer ampliaciones o cambios de uso si el solar no tiene conexión al alcantarillado.
En palabras de Hinojosa, “llama la atención que ya en un pleno de julio de 2017 se votó por unanimidad de todos los grupos municipales un compromiso público de dotar de red de alcantarillado el núcleo de Cala Murada. Han pasado siete años y todavía no se ha aprobado ni el proyecto”.
También se refirió “al peligro que supone para las arcas municipales las posibles indemnizaciones que puedan exigir los propietarios afectados por este incumplimiento del Ajuntament de Manacor”, a la vez que lamentaba “seguir funcionando a estas alturas con fosas sépticas, en contra del criterio medioambiental fijado por Europa a causa del elevado riesgo de contaminación de los acuíferos”.
El núcleo de Cala Murada es la única urbanización recepcionada por el Ajuntament que todavía no dispone de red de alcantarillado, a pesar de su antigüedad, puesto que nació con la ley estatal del Suelo de 1956, hace ya más de sesenta años. En aquella época no era obligatorio conectarse al alcantarillado y todas las construcciones funcionaban con fosas sépticas, aunque desde agosto de 2021 es obligatorio que todo el suelo urbano cuente con sistema de saneamiento.
El proyecto en cuestión está encargado a la empresa municipal SAM, y una semana después de la denuncia de Hinojosa en el Pleno, el alcalde Miquel Oliver, el delegado de Medi Ambient, Sebastià Llodrà, y el gerente de la SAM, Francesc Grimalt, ofrecieron una rueda de prensa para informar de que el Ajuntament solicitará una subvención de 8,4 millones de euros para la convocatoria de fondos del Impuesto de Turismo Sostenible (ITS) para financiar las obras de dotación de la red de alcantarillado en la zona norte de Cala Murada, conocida popularmente como los círculos, como informamos detalladamente en la página 6 de este mismo número. En todo caso, el proyecto presentado no cubre las obras necesarias en toda la urbanización.
