SIN RODEOS: Reacción de la constructora de las obras de Porto Cristo al ultimátum del Ajuntament
No sé si se trata de un ultimátum, pero el anuncio del Ajuntament de Manacor acerca de que se había otorgado un nuevo plazo a la empresa constructora de las obras de la primera línea de Porto Cristo, que finaliza el próximo martes, 31 de mayo -el anterior expirada el jueves de la pasada semana-, ha obrado una reacción de la constructora que permite abrigar esperanzas de que la calle Burdils y el Passeig de la Sirena estén en “perfecto estado de revista” en breve, aunque dudo que las obras estén a punto de ser entregadas al Ajuntament el próximo martes.
Por lo menos la empresa ha habilitado bastante más personal del que podía verse hasta ahora, y decir que, incluso el pasado domingo, unos catorce obreros estaban trabajando a una velocidad de destajo.
En la mañana de este miércoles, estaban ultimando el adoquinado de Burdils, a lo que corresponde la foto que ilustra este artículo. Sin embargo, todavía no habían arrancado las obras en el emblemático Passeig de la Sirena. De ahí mis dudas sobre la posibilidad de que las obras estén finiquitadas el martes de la próxima semana.
Es posible que, como nos cuentan desde el Ajuntament, la primera línea de Porto Cristo quede como una “copeta d’or”. Ojalá sea así, pero las penurias y pérdidas económicas a los comercios que han generado estas “obras de la vergüenza” tan ralentizadas durante meses, deberían ser compensadas económicamente a los negocios perjudicados. Y debería pagar las compensaciones la empresa constructora madrileña de la que siempre tendremos un triste recuerdo, por muy aceptable que quede la reforma.
Menos mal que también parece que se van acabando las obras de canalización de gas, aunque esta semana los vecinos de la calle Mar todavía sufrían los desmanes de las cunetas.
Bien está lo que bien acaba, aunque no es de recibo la pésima gestión de los responsables de unas obras que fueron empezadas tarde y mal, y continuaron peor.
El Ajuntament de Manacor debería tomar buena nota a fin de que nunca más se repitan tales esperpentos.
¡Ah!, y felices Fires i Festes de Primavera, manacorines i manacorins.
