
El Ajuntament de Manacor se pone manos a la obra con las playas y se adjudican los chiringuitos costeros
El Ajuntament de Manacor se está poniendo manos a la obra con las gestiones de la costa manacorina y, mientras la SAM mantiene la explotación y gestión de las playas, el consistorio cede la explotación de los chiringuitos de Cala Antena, Tropicana y S’estany a la empresa de El Matambrito S.L. en la temporada turística de 2022.
Si la documentación adjuntada es correcta, del 1 de mayo al 30 de noviembre, la gestión de los tres quiscos por valor de 56.000 euros se adjudicará próximamente a la antigua empresa concesionaria de las playas y socorrismo. Con la apertura de sobres, tan solo una empresa se ha interesado en los tres establecimientos playeros y, como única pujante, todo apunta a que la gestión se adjudique en breve.
De igual modo, y con el objetivo de poner a punto las playas, siete torres de vigilancia socorrista se instalarán en el municipio, pasando a formar parte del Ajuntament de Manacor ya que, hasta ahora, tan solo la torre socorrista de Porto Cristo era propiedad del consistorio. A su vez, la gestión de vigilancia en playa se encuentra aún sin adjudicar y, descartando a la SAM de asumir dicha labor, el presupuesto de la licitación abierta asciende hasta el 1.713.000 euros para los próximos 3 años de concesión. El precio de dichas labores ha ascendido y, según nos detallaba el regidor de Costes, Sebastià Nadal, se debe a la incorporación de una embarcación patrulla en las zonas de costa virgen, el aumento de horarios socorrista y la ampliación a un mínimo de dos socorristas por playa.
Dicho esto, y en medio de un temporal marítimo, la puesta a punto de playas se ha visto obligada a retrasar el avance de sus labores 15 días, aunque ya se han empezado a instalar baños y los postes de sombrillas. Aun así, no se esperan retrasos y el delegado Nadal afirma que “la SAM va a tener listas las playas en mayo para empezar la temporada con normalidad”. Con todas las críticas recibidas por la gestión de playas del año pasado, Nadal remarcaba que: “El primer año pagamos la novatada, pero este año, teniendo todo el material, todo tiene que ir bien. La SAM cogió la gestión de playas para garantizar el servicio, no para ganar dinero”. Así de rotundo era el delegado que se compromete con el servicio y destaca la primera puesta a punto para la paralela apertura de los primeros hoteleros en abrir.








